Isaiah Berlin
Berlin coincide parcialmente con Arendt en buscar el conocimiento, pero pretende buscarlo al relacionarlo de inmediato con una respuesta, después y al igual que Arendt le da un significado. Berlin pregunta sobre el origen de los conceptos y después define argumentos conducentes, estos últimos representan lo más profundo de nuestros pensamientos y definen la orientación que damos a determinadas actividades. Pero esto es válido tanto para el hombre común y corriente así como para los filósofos, puesto que si nos regimos por el orden natural, no hay ley que pueda reemplazarlo. Para Berlin la historia de la filosofía es paralela a la historia de los cambios en los modelos de conducta, que igualmente pueden formar experiencias positivas así como destructivas. El grado de permanencia de estas experiencias varia ya que el mundo externo que percibimos a través de los sentidos cambia a cada momento, pero la interpretación que damos a estos cambios en nuestro interior es mucho más pausible, tarda mucho tiempo para que el ser humano cambie su convicción de las cosas. En lo que se refiere a la filosofía política, Berlin considera que se encuentra fuera del alcance de la investigación empírica, ya que ese conocimiento lo basa en modelos objetivos y concisos. Debido a que la política es desarrollada por el ser humano, no puede ser comprendida sin relacionarla con la naturaleza, es decir, el conocimiento que todo filósofo tiene sobre los asuntos humanos será determinado por lo que es o puede ser el hombre. Debemos considerar en consecuencia, que el hombre se ve influenciado por infinitas presiones, relaciones, intereses y conflictos que forman un modelo de conducta que por obligación responde a esas características. Derivado de esta relación hombre - naturaleza tenemos que el tipo de conocimiento que Berlin pronuncia será siempre actual y objetivo con un grado de continuidad y similitud que lo pondrá siempre al frente de cualquier conocimiento empírico.
Para entender la concepción del hombre que Berlin propone, es necesario comprender primordialmente que su teoría la desarrolla en un mundo occidental y tiene una visión despótica de las relaciones humanas, sustentado principalmente en la ley natural. Por consecuencia, el ser humano y su entorno forman un todo natural que por ley será coherente y sin contradicción alguna, con una visión propositiva de que el conocimiento verdadero no tiene contradicción puesto que se encuentra fundamentado en cuestiones de valor, principios y capacidades ideales.
Otra propuesta de Berlin es la creencia de que el ser humano puede llegar a formar la sociedad perfecta por supuesto con personas perfectas, que ciertamente es lo que ha dado origen a los pensamientos más idealistas del ser humano a través de la toda la historia del hombre desde que se inventó el concepto de poder. Sin embargo las sociedades humanas aunque han perseguido el mismo fin de controlar el poder, se han desarrollado según las leyes naturales de su entorno y por consecuencia han sido diferentes de todas las demás, por lo tanto tienen intereses, costumbres y pensamientos diferentes. Concluimos que la idea de Berlin de que puede existir la sociedad perfecta es absurda e incluso retrograda para los intereses del poder ya que los valores del ser humano no son circunstancias sino medios necesarios para crear las condiciones de desarrollo de toda estructura social.
Para Berlin, el hombre es un ser independiente puesto que puede determinar cómo y cuándo realizar sus acciones, es decir, el hombre es autónomo. El hombre será entonces el ser más elevado del mundo, convirtiéndose así en un medio que busca llegar al fin que es el hombre mismo y será de facto el elemento de mayor valor, sino es que se convierte en el único. Aquí surge una complicación, que es la de comprender y distinguir entre razón y pasión, que son dos características inherentes a la existencia del ser humano en el mundo. Podemos enunciar que esta divergencia existe por que el hombre siempre tendrá diferentes capacidades con respecto a los demás seres que lo rodean y por consecuencia, la rivalidad entre un individuo y otro así como entre un grupo social y otro es inevitable. La razón se convierte en una herramienta y deja de ser una facultad del pensamiento del hombre. Entre más entendida y razonada sea esta divergencia, el hombre será más libre. Indudablemente que los problemas ocasionados por el deseo de dominio nunca dejarán de existir, por lo que es obligado preguntarse en que grado afectarán su libertad.
Encontramos que Berlin plantea un sistema filosófico basado en todo un análisis de las relaciones humanas, desde la concepción primaria de su pensamiento hasta la culminación del deseo humano natural que es la libertad. Analiza el razonamiento de su pensamiento y expone la legitimidad de sus fines estudiando sus creencias morales y políticas, puesto que la filosofía no es un estudio aislado, sino que representa una investigación del conjunto de características que rodean al ser humano. El filósofo es un pensador que indaga sobre todos los posibles orígenes y proyecta las posibles consecuencias, no para dar la respuesta precisa, sino para proporcionar los elementos que nos ayuden a tomar la mejor decisión.
El valor primario del ser humano que es la libertad, Berlin lo clasifica en tres:
- Libertad espiritual. Entendida como la purificación del espíritu para encontrar la libertad interior.
- Libertad moral. Que será aquella que permita al ser humano el control de los deseos y pasiones.
- Libertad económica. Que lleva consigo la libertad de decisión del hombre a dedicarse a lo que mejor le plazca a fin de hacerse de los satisfactores necesarios a sus necesidades.
Pero el ser humano posee libertades que van en contra del orden natural y que puede adquirirlas por medio de la convivencia con la sociedad misma y esta ser su causante, que sin importar aun sean sancionadas representa una pérdida de libertad. Sin embargo, las sociedades contemporáneas han permito la libertad en la medida en que seamos sometidos por la ley, no obstante la enorme complejidad en que se ha convertido su control. ¿Que es lo que nos impide realizar actos que van en contra del orden normal? ¿Quién determina la normalidad de las cosas? ¿Quién limita las libertades de los demás?